(Buenos Aires – La Plata)
A ver, no sé por dónde empezar porque este día pasaron muchas cosas maravillosas.
Conocí a Tigre! (alguien especial), fui a ver un partido en vivo de River Plate, mi pasión, mi debilidad (vs. Lanús), gritar los goles del equipo, escuchar a los Borrachos del Tablón cantar los canticos de la banda roja, estuvo fenómeno. Elizondo fue el arbitro del partido.
“Yo lo Domingo voy a ver al campeóooooooon, porque lo llevo en el alma… Esta locura que siento por vos, no se compara con nadaaaaaaaaaa…”
Esa tarde llegar a cualquier lado se convirtió en una travesía, tanto para juntarnos con Tigre y su primo antes del partido, que de hecho fueron ellos quienes consiguieron las entradas y nos acompañaron, como para llegar al estadio de Lanús.
Me llamó la atención ver mujeres en el estadio, a parte de nosotras dos, pero me enteré que River Plate es el equipo que más fanáticAS tiene. Lo mejor es que tenemos preferencia, nos dejan entrar sin tener que pasar por el gentío y pasar un mal rato.
Bien!
Después del juego salimos a cenar. Eva Longoria nos llamó para saludar y tuvo el placer de hablar con Tigre por teléfono. Yo no podía pedir más. Tenía la tarde hecha y parte de de la noche. La habías pasado bárbaro! Y bueno, teníamos que regresar a La Plata temprano porque Buffoni tenía clases al otro día.
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